Caso 1: Almas perdidas en una médium
La alumna, médium y tarotista, tiene un sobrepeso de aproximadamente 15 kilos.
En su ficha personal puede leerse que no padece enfermedades ni toma medicación alguna, pero sí se menciona un dolor en las vértebras lumbares.
Estos datos ya nos sirven para preveer aquello que podemos llegar a encontrar en el testaje, como por ejemplo, afectaciones en los chakras sexual o plexo solar, debido al dolor en la zona de la espalda, así como alteraciones en los chakras del tercer ojo o coronilla, por su capacidad mediúmnica y de canalización.
Al comenzar el testaje con Péndulo Hebreo, nuevamente se detectan miasmas en capa 1 de los dos primeros chakras.
Sabemos que esto puede ser indicio de alma perdida, según se explica en el Manual del Péndulo Hebreo, por lo tanto, continuamos con el procedimiento indicado para dichos casos.
En esta ocasión, el alma perdida se trata de un ser que intenta subir a la luz, sin necesidad de transmitir mensaje, ni a la alumna, compañeros de clase o profesora.
Al constatar que el tratamiento aplicado ha sido correctamente realizado, reanudamos el testaje.
Nuevamente se detectan miasmas en capa 1 de los dos primeros chakras, pero esta vez seguimos testando para corroborar que se trate realmente de una afectación en el campo electromagnético y no de un "ser" pegado al mismo.
Para sorpresa del grupo, los miasmas se detectan en la capa 1 de todos los chakras. Volvemos a pasar la etiqueta ALMA PERDIDA y nuevamente da positivo.
Al recordar que la alumna es médium entendemos el motivo de que se le peguen las almas perdidas.
Le pedimos que abra un portal de luz en una esquina de la sala para que todas aquellas almas que necesiten ayuda puedan subir sin dificultad.
Cuando lo hace, volvemos a testar.
Ya no se detectan entidades espirituales y los miasmas que se encuentran concuerdan con el estado de salud explicado al comenzar.
Caso 2: Entidades negativas en un paciente adicto
En el testaje se encuentran miasmas en todos los chakras. Desde el chakra 1 al 6, miasma en capa 1 y en el chakra 7, miasma en capa 5.
Este diagnóstico nos dice que no se trata de un alma perdida como en el caso anterior, sino de morbosidades que afectan seriamente al campo electromagnético del paciente.
Otro elemento llama la atención y es el detectar entidad negativa en las siguientes capas:
CH 1 capa 7, CH 2 capa 1, CH 3 capa 7, CH 4 capa 1, CH 5 capa 7, Timo capa 1, CH 5 capa 7, CH 6 capa 1, CH 7 capa 7.
La conclusión es que el paciente tiene dos entindades negativas. Una de ellas le afecta en la capa 1 y la otra en la 7.
Caso 3: Miasmas en una paciente con cáncer
La paciente es tratada con la terapia de Péndulo Hebreo además de todas las indicaciones médicas.
El cáncer se logra controlar.
Se continúa con la terapia de péndulo y en los testajes siguen apareciendo miasmas psicóticos, no luéticos.
Al año, el cáncer se vuelve a manifestar.
Recordamos que, cuando la enfermedad llega al cuerpo físico se hace más difícil evitar que aquello que es crónico pueda pasar a ser degenerativo.